Cry, cry baby
Ahhhh! Como me gusta dramatizar!!!
Entonces voy caminando con cara de preocupada y miro para los costados, trato de pensar "que linda es mi ciudad" pero automaticamente en algun lugar del cerebro se empieza a producir musica y me siento como Cher en Clueless, claro que sin la fuentecita ni All by myself al grito pelado de Celine Dion. Podria llorar, claro que si... pero mejor no, el llanto queda reservado para caminatas de madrugada debajo de la lluvia veraniega, me sienta bien el look *eso son lagrimas o fue el chaparron el que te corrio el rimmel?*. En la siguiente cuadra veo alguna vidriera con ropa mediocre y ya mi mente salta al topico *que mal se viste la gente*. Por supuesto, ya me olvide de mi soledad y tristeza.
Otras veces simplemente estoy tirada en la cama, aburrida. Pongo When the pawn de Fiona y empiezo a imaginar que tuve la peor ruptura ever known. Me pongo furiosa y empiezo a odiar a toda la raza masculina, mi voz se hace mas aspera y grave, cierro los puños y los ojos. Lo odio, lo odio con toda mi alma. Claro que despues me acuerdo de que el no es malo y que no tuve una pelea catastrofica ni nada parecido. Me levanto, apago el equipo y me tomo un nesquick.
Voy al blockbuster... paseo por las gondolitas mirando sin ver hasta que alguna cajita me llama la atencion. Miro para arriba y claro, es la seccion de romanticas. Termino en casa mirando The way we were y pensando "claaaaro, es como Hubble, no entiende una goma de nada". Alguna que otra vez fui Sally, con neurosis galopante incluida, claro que no tan llorona. Y veo las pelis... y con cada una puedo sentirme identificada, trato de convencerme de que yo tambien tuve mi historia de amor (truncado) que me modificara para el resto de mis dias. En algun punto me lo creo, pero supongo que solo sera cuestion de tiempo darme cuenta de la cantidad de patrañas que unas semanas hormonales y la abstinencia a el me pueden generar.
Entonces voy caminando con cara de preocupada y miro para los costados, trato de pensar "que linda es mi ciudad" pero automaticamente en algun lugar del cerebro se empieza a producir musica y me siento como Cher en Clueless, claro que sin la fuentecita ni All by myself al grito pelado de Celine Dion. Podria llorar, claro que si... pero mejor no, el llanto queda reservado para caminatas de madrugada debajo de la lluvia veraniega, me sienta bien el look *eso son lagrimas o fue el chaparron el que te corrio el rimmel?*. En la siguiente cuadra veo alguna vidriera con ropa mediocre y ya mi mente salta al topico *que mal se viste la gente*. Por supuesto, ya me olvide de mi soledad y tristeza.
Otras veces simplemente estoy tirada en la cama, aburrida. Pongo When the pawn de Fiona y empiezo a imaginar que tuve la peor ruptura ever known. Me pongo furiosa y empiezo a odiar a toda la raza masculina, mi voz se hace mas aspera y grave, cierro los puños y los ojos. Lo odio, lo odio con toda mi alma. Claro que despues me acuerdo de que el no es malo y que no tuve una pelea catastrofica ni nada parecido. Me levanto, apago el equipo y me tomo un nesquick.
Voy al blockbuster... paseo por las gondolitas mirando sin ver hasta que alguna cajita me llama la atencion. Miro para arriba y claro, es la seccion de romanticas. Termino en casa mirando The way we were y pensando "claaaaro, es como Hubble, no entiende una goma de nada". Alguna que otra vez fui Sally, con neurosis galopante incluida, claro que no tan llorona. Y veo las pelis... y con cada una puedo sentirme identificada, trato de convencerme de que yo tambien tuve mi historia de amor (truncado) que me modificara para el resto de mis dias. En algun punto me lo creo, pero supongo que solo sera cuestion de tiempo darme cuenta de la cantidad de patrañas que unas semanas hormonales y la abstinencia a el me pueden generar.
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